Los filtros interiores están indicados sobre todo para acuarios con 360º de visión, equipos sin muebles cerrados o bien, según el caudal, para acuarios más pequeños. Con su gran superficie de actuación, los cartuchos filtrantes realizan tanto la filtración mecánica como la descomposición biológica de sustancias nocivas, que se inicia automáticamente al poco tiempo de ponerlo en marcha. Los potentes filtros interiores ofrecen además una comodidad óptima y la tecnología perfecta.
Especialmente práctico resulta el «Sistema Pick-up»: para limpiar el filtro, se extrae tan sólo el vaso del filtro, mientras que la carcasa del motor y el cable de conexión permanecen fijos en el acuario.
El caudal de la bomba es regulable y permite adaptar el agua bombeada al volumen del acuario.
Con la boquilla de salida adaptable en un ángulo de 90º a cada lado se optimiza la circulación del agua hasta el último rincón del acuario.